Una mujer de 81 años fue encontrada asesinada a puñaladas por su nieto de 12 años en una vivienda de la localidad bonaerense de Burzaco, y por el crimen detuvieron a una inquilina de la víctima, informaron hoy fuentes policiales.

El hecho ocurrió anoche en una casa ubicada en Aristóbulo del Valle al 1600 entre Terrero y Hualfin, en la citada localidad del partido de Almirante Brown, en la zona sur del conurbano bonaerense.

Fuentes policiales informaron a Télam que la víctima, identificada como Clara Dionisia Paz, era propietaria de un terreno en el cual vivía en la parte de adelante y detrás tenía dos habitaciones que alquilaba.

La mujer fue encontrada por uno de sus dos nietos, de 12 años, toda ensangrentada en un baño que estaba en construcción.

“Mi abuela tenía un golpe en la frente, lesiones en las manos como que quiso agarrar el cuchillo y tenía el cuello cortado”, contó al canal Todo Noticias Bruno, el otro nieto mayor de edad.

Según relató el joven, antes de entrar al inmueble su hermano se encontró con una inquilina, quien tenía sangre en las manos y ella le dijo que se había cortado las manos con “un vidrio”.

“Mi hermano se la cruza y ella le dijo que se cortó con un vidrio y en la esquina a otro chico que se cortó con una olla”, indicó Bruno, quien añadió que tras cometer el crimen de su abuela, la inquilina que trabaja como kinesióloga le tiró “baldes” encima del cuerpo.

El chico avisó a los vecinos que llamaron a la policía y la sospechosa, identificada como Noemí Marta Argüello (69), fue detenida por efectivos de la comisaría 2da. de Burzaco a los pocos minutos, ya que se había ido a la casa de su hermana, situada a dos cuadras.

Al momento de su aprehensión, la mujer tenía cortadas sus manos y sangre en sus zapatillas y prendas de vestir.

Además, los uniformados secuestraron en la escena del crimen un cuchillo Tramontina con mango de plástico negro que tenía manchas de sangre.

“No era buena inquilina, siempre buscaba un pelo al huevo, con mi abuela y conmigo tuvo varias agarradas porque no pagaba, pero mi abuela siempre fue buena y la dejaba, pero yo quería que se fuera”, afirmó el muchacho.

Además, Bruno contó que en otra oportunidad la acusada amenazó a su madre, que ya no vive allí, “con el mismo cuchillo” que se supone usó para matar a Paz.

En tanto, Alejandra, sobrina de la víctima, aseguró que su tía era “una persona excelente y una muy buena mujer que no merecía esto”.

“(Argüello) destrozó a una familia, ojalá quede presa y no salga más”, pidió la mujer, quien agregó: “Clara era todo acá, cuidaba a los chicos”.

Alejandra dijo que la imputada por el crimen “hace dos años llegó a vivir, estuvo un año y se fue, pero volvió otra vez a alquilar”.

Según la mujer, tras el crimen la acusada “revisó toda la ropa, la habitación, el baño y quedó todo ensangrentado” y se llevó “plata que sacó de un cajón”.

Por último, Darío, el otro inquilino que vive en el lugar, destacó que la víctima “era una persona excelente” y que nunca “tuvo ningún problema” con ella.

“Teníamos conflictos porque hace dos meses entraron a robar y la puerta estaba abierta, dudábamos de ella (por Argüello) pero Clara decía que no podía ser. Esta señora se aprovechó de esa bondad”, concluyó.

El hecho es investigado por el fiscal Santiago Vadillo, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 del Departamento Judicial Lomas de Zamora, quien dispuso que mañana a las 10 se realice la autopsia correspondiente e indagará a la sospechosa.