Durante el fin de semana, en los partidos disputados en la provincia de Buenos Aires, Córdoba y Capital Federal, se impidió el acceso a 12 barras a los estadios y se controló a más de 100.000 personas.
Los encuentros en los que se desplegaron los controles fueron: Huracán y Boca Juniors, Racing y San Lorenzo, River Plate y Rosario Central, Talleres de Córdoba y Atlético de Tucumán, en primera división y, en cuanto a la Primera “B”, Almirante Brown y Acassuso. Como resultado, se aplicó el derecho de admisión a 8 personas y 4 fueron detenidas por contar con pedidos de captura por diferentes delitos.
