Detuvieron a cinco policías por la muerte de presos en Pergamino

1044

Cinco efectivos de la policía bonaerense fueron detenidos hoy por la muerte de siete presos ocurrida el 2 de marzo último a raíz de un incendio en la comisaría de Pergamino y, por el hecho, también ordenaron la captura del titular de dicha seccional, quien todavía no pudo ser localizado, informaron fuentes judiciales.

Los apresados fueron identificados por la justicia como el sargento César Brian Carrizo, el teniente primero Sergio Ramón Rodas, los oficiales Alexis Miguel Eva y Matias Exequiel Giullietti, y la ayudante de Guardia Carolina Denise Guevara.

Las detenciones fueron llevadas a cabo por instructores judiciales de la Procuración General bonaerense y seis brigadas de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, quienes esta tarde continuaban con las diligencias en procura de concretar la captura del comisario Alberto Sebastián Donza.

Las fuentes precisaron a Télam que dos de los acusados fueron apresados en la vecina ciudad de Junín, otro tanto en Pergamino y un quinto en un pueblo cercano llamado El Socorro.

Los mismos informantes señalaron que el fiscal de Pergamino a cargo de la causa, Néstor Mastorchio, solicitó las detenciones de los policías por el delito de “abandono de persona seguido de muerte”, lo que fue convalidado por el juez de Garantías 1 de dicho Departamento Judicial, César Solazzi.

El instructor judicial basó la imputación fundamentalmente en los testimonios de los otros presos alojados en la comisaría incendiada y que coincidieron en que los policías no hicieron ningún esfuerzo por tratar de salvarlos, detallaron las fuentes.

En tanto, voceros de la cartera de Seguridad bonaerense informaron a Télam que ante esta situación los seis efectivos fueron desafectados de la fuerza.

En el caso del sargento Carrizo y del oficial Eva, quienes se encontraban de guardia en la comisaría de Pergamino al momento del incendio, éstos ya habían sido separados preventivamente de sus cargos el mismo día del hecho.

Por su parte, el abogado Pablo Caldentey, quien representa como querellante a los familiares de dos de los detenidos muertos, dijo a Télam que no descarta que la imputación alcance a otros policías de Pergamino.

Las detenciones de los cinco efectivos se concretaron al cumplirse un mes de la muerte de los siete presos, razón por la cual, la Comisión Provincial por la Memoria (CPM) se reunió esta mañana en Pergamino con la presencia del Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel; Nora Cortiñas, de la Línea Fundadora de Madres de Plaza de Mayo; y el padre Pedro Di Paola.

Pérez Esquivel, Cortiñas y Di Paola se entrevistaron con familiares de las víctimas y con el intendente Javier Martínez, tras lo cual participaron de una misa en la parroquia Perpetuo Socorro.

El hecho ocurrió la tarde del 2 de marzo último, luego de que dos presos conflictivos iniciaron una pelea que derivó en una quema de colchones y un posterior incendio en la zona de calabozos de la comisaría situada en Dorrego 654 de Pergamino, donde había un total de 19 detenidos.

“Lo que dicen los testigos es que dos de los fallecidos inician una pelea y después los meten en la misma celda”, explicó el fiscal Mastorchio, quien detalló que la discusión de inició “por una vendida de unas facas” ya que uno de los detenidos “andaba diciendo que el otro las tenía”.

“Los sobrevivientes señalaron que a ellos los ‘engomaron’ (encerraron) por culpa de los otros y que los tendrían que haber encerrado a ellos dos y no a todos”, agregó.

A partir de esto, se dio “una escalada de hechos” que terminó en el incendio que provocó la muerte de Sergio Filiberto (27), Federico Perrota (22), Alan Córdoba (18), Franco Pizzarro (27), John Mario Chillito Claros (25) -de nacionalidad colombiana-, Juan Carlos Cabrera (23) y Fernando Emanuel Latorre (24).

De acuerdo a los médicos forenses que practicaron las autopsias, estos siete presos murieron por inhalación de monóxido de carbono y sofocación a raíz de la presencia del fuego.

Este incendio se convirtió en la mayor tragedia ocurrida en una seccional de la Policía de la Provincia de Buenos Aires ya que en otros casos similares registrados entre 2000 y 2009 en los partidos de La Matanza, Quilmes, Berazategui y La Plata no hubo más de cuatro víctimas fallecidas.