La niña de cinco años que fue arrojada desde el pullman de un teatro del barrio porteño de Retiro continuaba hoy internada en un hospital pediátrico de la ciudad fuera de peligro, mientras la mujer que la tiró al vacío quedó hospitalizada en un neuropsiquiátrico con intervención de la justicia.
La niña sufrió lesiones en sus brazos y cortes al caer desde casi seis metros desde el pullman del teatro ND Ateneo, cuando anoche, cerca de las 21, una mujer que es paciente psiquiátrica la tomó de un brazo y la empujó hacia abajo.
Fuentes de la investigación, señalaron que la atacante era una paciente del neuropsiquiátrico para mujeres Braulio Moyano que tenía salidas transitorios y al parecer anoche sufrió una “descompensación psicótica”.
El incidente se produjo en la segunda canción del concierto del cantante Gabo Ferro, quien de inmediato al enterarse de lo ocurrido suspendió las funciones.
El teatro, por su parte, indicó en un comunicado que “las tres personas que resultaron damnificadas por el incidente provocado por una persona del público fueron atendidas por personal médico”.
“La persona responsable del hecho fue retirada del teatro bajo custodia policial y del SAME”, añadió el teatro y lamentó “profundamente lo sucedido, que está fuera de toda lógica y previsión”.
Los informantes consultados por DyN señalaron que la niña fue llevada de urgencia al hospital Gutiérrez porque presentaba “golpes, hematomas y cortes”, donde continuaban en observación.
En tanto, la atacante fue derivada al hospital Rivadavia donde la evaluaron los psicólogos y psiquiatras de guardia que determinaron que era “peligrosa para sí y para terceros” por lo que decidieron sedarla y aconsejaron su internación con guardia policial.
Los investigadores determinaron se trataba de una interna del neuropsiquiátrico Moyano, que gozaba de salidas transitorias, por lo cual volvió a ser trasladada a ese centro de salud mental.
Testigos que presenciaron el incidente dijeron a distintos canales de televisión que creían que “había caído una luz, algo negro del techo, un bulto”, por lo que se generó “un griterío y pararon la música”, hasta que el público y luego los médicos rescataron a la nena y se le entregaron a la madre.
