El abogado de los hermanos prófugos Martín y Cristian Lanatta consideró hoy “inconcebible” que sus defendidos “vayan a entregarse” y afirmó que la fuga busca generar “un primer traspié” en el “nuevo gobierno” de Mauricio Macri.
En cuanto al ataque a balazos contra dos policías en la localidad bonaerense de Ranchos, el jueves pasado, Daniel Mazzocchini aseguró que “me deja muy serias dudas (…) yo descreo que hayan sido ellos”, por lo que especuló que fue “un escenario montado por mentes perversas”.
Además, puso en duda que la agente herida, Lucrecia Yudati, haya podido identificarlos y sostuvo que “si ahora lo hace es por una condición impuesta”.
“Quizá lo de Ranchos fue un escenario montado por mentes perversas y sin límites, para matarlos o para endilgarles responsabilidades en toda la situación”, indicó el letrado en declaraciones a radio América.
Para el abogado, que dijo haber presentado recursos de los Lanatta hasta diciembre pasado, “a estos chicos los están usando políticamente, son como tres flechas dirigidas de un bando al otro” y concluyó que “la fuga fue un traje a medida para generar un primer traspié en el nuevo gobierno”.
“No hay ninguna negociación para entregarse, al menos en la que yo haya intervenido” definió y argumentó que esa posibilidad se reduce luego de que “les imputen dos tentativas de homicidio” por lo que concluyó: “Los conozco bien, es inconcebible que se vayan a entregar”.
Mazzocchini recordó que en la causa por el tráfico de efedrina y el Triple Crimen “hay otro prófugo del que nadie habla”, en referencia a Ibar Esteban Pérez Corradi, acusado de financiar a los Lanatta y Schillaci, quien en 2011 fue excarcelado por la Cámara Federal y desapareció.
“Y ahí también estaba toda la policía detrás y había otra gestión política”, señaló finalmente el abogado.
