El empresario Diego Sarjanovic, que estaba desaparecido desde el viernes pasado, fue encontrado hoy asesinado de 64 puñaladas en un departamento del centro de la ciudad de Rosario y por el crimen fueron detenidas en Córdoba una mujer de 38 años y su madre, de 60.
Los investigadores no descartan ninguna hipótesis: se analiza si la víctima tuvo una relación sentimental con la menor de las detenidas, algo que deslizó el propio abogado de la familia, o si sólo tenían un vínculo comercial que escondería un móvil económico en el crimen.
El fiscal de la causa, Miguel Moreno, esperaba los resultados de la autopsia mientras que dispuso el traslado de las arrestadas a la ciudad de Rosario, donde recién el miércoles tendrá lugar una audiencia para mostrarles las pruebas e imputarlas -eventualmente- del homicidio.
Sarjanovic, de 44 años y padre de dos niños, era gerente financiero de la empresa gastronómica MC Catering, aunque también trascendió que se dedicaba a realizar colocaciones financieras para inversiones de particulares. El empresario había salido el viernes pasado de su casa del barrio San Eduardo, de la zona oeste de Rosario, alrededor de las 8.30, en su auto Volkswagen Suran, hacia la sucursal del banco Comafi ubicada en la intersección de Mitre y Santa Fe para realizar una operación financiera, pero no llegó a destino.
El empresario no llevaba dinero cuando salió y mantuvo un último contacto con un compañero de trabajo a las 9.30, a quien le informó que se dirigía a la zona céntrica. Pero con el correr de las horas y sin ninguna novedad, la familia hizo la denuncia de la desaparición y la Dirección de Investigaciones de la Policía comenzó a realizar las tareas para dar con el hombre.
Esta madrugada, el cadáver de Sarjanovic fue hallado en el departamento B de un edificio situado en Moreno 511, de esta ciudad: tenía 64 puñaladas y a su lado había un cuchillo de cocina que habría sido usado para matarlo.
Los investigadores llegaron allí porque el departamento era alquilado por la principal sospechosa, identificada solo como “Virginia”, una mujer que había trabajado con Sarjanovic.
“Está confirmado que tenían una relación comercial, pero hay diferentes hipótesis y el fiscal está entrecruzando los datos para ver si ese vínculo excedía a otro tipo de relación”, dijo el vocero de la Fiscalía, Sebastián Carranza.
En tanto, el abogado de la familia, Fausto Yrure, afirmó que Sarjanovic “tenía una relación comercial con esta mujer, habían sido compañeros de trabajo y ella había hecho un emprendimiento personal relacionado con ropa, pero la relación con Diego continuó y le prestaba plata; estamos hablando de millones, es mucho dinero y aparentemente también habría una relación afectiva”.
“Diego habría ido allí voluntariamente porque es un edificio en pleno centro y para la contextura física de este hombre era imposible que hubiera ingresado de otra manera -dijo-. Además, varios vecinos que escucharon ruidos de peleas, pero al parecer el viernes tarde, por la noche. Luego, la mujer se acercó durante el fin de semana a hablar con varios vecinos y les pidió disculpas por los ruidos ocasionados, fundamentando que estaba cuidando a su padre que estaba enfermo”.
Según el abogado, desde el viernes pasado “Virginia” era la principal sospechosa e incluso “había enviado algunos mails a su hermana inculpándose”.
En base a esas sospechosas, miembros de la Policía de Investigaciones (PDI) y personal de la comisaría 3ra. allanaron el departamento donde se halló el cadáver, y otros de la calle Pellegrini al 1400, de Rosario, donde residía la mujer de 38 años.
Pero la policía no la encontró y, con la certeza de que la sospechosa había huido de Rosario, se dispuso un rastrillaje que permitió su detención y la de su madre en el kilómetro 637 de la ruta 8, a la altura de la localidad cordobesa de Las Vertientes, cuando viajaban en un Chevrolet Corsa, aparentemente con destino a Mendoza. Aún no está claro si la madre de la sospechosa pudo haber tenido vinculación con el crimen, pero llamó la atención de los investigadores que “Virginia” hubiera podido dominar sola al empresario, por lo que se analiza además si pudo haber estado “dopado”. (Dyn)
