Una mujer fue asesinada de un balazo en la cabeza en el sector de los jardines de la Catedral de Bariloche, en pleno centro de la ciudad turística, y por el femicidio buscan intensamente a su pareja, informaron fuentes policiales.
La víctima es Valeria Coppa, madre de dos hijos de 9 y 16 años producto de una relación anterior y agente del Centro de Atención Integral a la Niñez y Adolescencia (CAINA) de esta ciudad, una institución que recibe a adolescentes con problemas sociales, económicos y de conducta.
El hecho ocurrió alrededor de las 16 de ayer cuando la mujer fue atacada por un hombre que le disparó un balazo en la cabeza cuando se hallaba en los jardines que rodean a la catedral de la ciudad, sobre la calle Vicealmirante O’Connor, una zona visitada por decenas de turistas y vecinos que aprovechan el espacio para descansar.
Precisamente, varias personas encontraron el cuerpo de Coppa tirado en el césped junto a una bicicleta, dijeron las fuentes policiales, quienes precisaron que la mujer presentaba una herida en la cabeza.
De inmediato, los policías que llegaron al lugar alertaron al personal del hospital zonal Ramón Carrillo frente a lo que suponían en un primer momento podía tratarse de un accidente de tránsito.
Los médicos descubrieron que la asistente social tenía un proyectil en su cabeza y a pesar de sus esfuerzo falleció en el centro de salud cerca de la medianoche.
Los investigadores de la Policía de Río Negro tienen como principal sospechoso a un hombre identificado como Mariano José Cordi (41), quien mantenía una relación sentimental con Coppa desde hacía poco tiempo, informaron a Télam fuentes policiales.
Por estas horas, el rastrillaje se concentra en la zona de la casa del posible autor, cerca del barrio Alto de Bariloche, y las propiedades de sus amigos y familiares, confirmaron estas fuentes.
Diversas organizaciones sociales convocaron a los vecinos de la localidad para realizar una marcha, en reclamo por la violencia hacia la mujer, que partirá hoy a las 18 desde las calles Onelli y Brown.
El caso es investigado por la Fiscal Betiana Cendón con la colaboración de la Unidad Fiscal de Delitos contra las personas, el Gabinete de Criminalística de la Policía de Río Negro y agentes de la fuerza.
