El profesor de inglés que fue detenido en la ciudad de La Plata acusado por una serie de abusos sexuales se negó a declarar ante el fiscal Marcelo Martini pero seguirá detenido, informaron fuentes judiciales.
Martín Pérez, de 50 años, fue detenido el martes pasado a la noche por personal de la Policía Bonaerense en su casa, situada en las calles 57 entre 17 y 18, en pleno centro de la ciudad.
El detenido está siendo investigado por supuesto abuso sexual de al menos cuatro niñas de entre 9 y 10 años, quienes eran sus alumnas particulares, aunque los investigadores analizan otros seis casos y se sospecha que las víctimas podrían ser muchas más.
Efectivos de la Dirección Investigaciones Cibercrimen de La Policía, que realizaron la detención del acusado, secuestraron en la vivienda del profesor equipamiento informático que contenía fotos y filmaciones que mostraban los abusos y las violaciones.
Una fuente judicial aseguró que en las imágenes “se ven niños realizando poses sexuales” y que en algunas “aparece el imputado junto a menores” cometiendo abusos.
De acuerdo con lo informado por los investigadores, el detenido “tenía una familia constituida, con esposa y un hijo” y trabajaba dando “clases de apoyo de inglés a niños” que cursan tercero y cuarto grado de nivel primario.
Asimismo aseguraron que “en los encuentros el profesor, con música de fondo, abrazaba a los niños hasta entrar en confianza y luego, a medida que pasaba el tiempo, llegaba a tocar sus genitales, entre otros abusos”.
Los mismos voceros aseguraron que, “entre otras maniobras”, el profesor “exhibía a sus alumnos imágenes sobre representaciones de la ficción ‘Alicia en el país de las maravillas’, donde el dibujo de la niña mantenía relaciones sexuales con otro personaje”.
La investigación comenzó hace un par de meses con cuatro casos denunciados, pero habría seis más “y, de acuerdo al relevamiento informático, podrían ser entre 35 y 40 las víctimas”, dijo uno de los jefes policiales que intervino en el procedimiento.
Voceros policiales revelaron que, “al momento de la detención el imputado, que para los vecinos era un hombre serio y cordial, se mostró tranquilo”.
