Una de las tías de Gabriela Daiana Villarroel, la joven de 18 años que ayer fue hallada asesinada dentro de bolsas de consorcio en una pensión del barrio porteño de Villa Lugano, dijo hoy que el supuesto asesino, tío de la víctima y suboficial de Prefectura Naval, “se sentía acorralado y por eso se entregó”.

Se trata de Margarita, quien en declaraciones a la prensa manifestó que fueron “los rumores” que ella misma recogió entre los vecinos del barrio los que orientaron la búsqueda de su sobrina en dirección al ahora detenido, llamado Néstor Fabián Quintana (29).

“El oficial de la 48 (por la comisaría porteña que llevó adelante la investigación) me dijo anoche ‘esto (por el hallazgo del cadáver de su sobrina) es gracias a usted porque se guió por los rumores y nos vino a avisar, gracias a usted la encontramos pero llegamos tarde'”, dijo Margarita, en referencia a los comentarios de vecinos que indicaban que Gabriela había sido vista en otras oportunidades con Quintana.

La mujer también afirmó que el suboficial de Prefectura estuvo “el sábado a la noche en la comisaría” y que, luego de incurrir en contradicciones en distintas entrevistas con la policía, “se sentía acorralado y por eso se entregó”.

Además, Margarita relató que mientras buscaban a Gabriela, distintas personas le enviaban mensajes a través de la aplicación Whatsapp y que el hombre que la asesinó “leía los mensajes”.

“Los mensajes tenían un tilde de visto, y eso es lo que fui a avisar a la comisaría. La haya matado antes o la haya matado después, el hombre es el que leía los mensajes”, afirmó la tía de Gabriela, y lamentó entre lágrimas que la víctima no haya acudido a ella si es que tenía problemas o incluso una relación clandestina con Quintana, como él mismo afirmó a las autoridades.

“Yo le dije ‘hija contá conmigo, las puertas de mi casa están abiertas’. Parece que no fue suficiente para que se acerque y confíe en mí como tía”, agregó.

“¿Cómo no vas a ir con tu tío? Si tu tío te dice te alcanzo acá, te llevo allá, vos vas a creer, si es tu tío”, finalizó Margarita, en referencia a la confianza de la que pudo aprovecharse Quintana para llevarla a la pensión.