Matías Bagnato, el único sobreviviente de la denominada “Masacre de Flores”, en la que toda su familia murió en un incendio en su casa en 1994, pidió hoy que la Cámara de Casación Penal no le conceda salidas transitorias a Fructuoso Alvarez González, condenado a prisión perpetua por el caso.
“Estoy cansado de todo esto, tengo miedo de que salga. Los informes que le hicieron dan todos negativos, él no está arrepentido de lo que hizo y es un manipulador”, dijo a Télam Bagnato, quien durante varios años fue amenazado de muerte por el detenido.
Hace alrededor de un mes, el juez de Ejecución Penal 1, José Carlos Pérez Arias, rechazó un pedido de la defensa de Alvarez González para que le concedan salidas transitorias con el argumento de que ya lleva 20 años preso. Sin embargo, el magistrado tuvo en cuenta el informe “desfavorable” elaborado por asistentes sociales que consideraron que el vínculo interpersonal denunciado por el imputado “dista de ser el adecuado para los egresos”.
Es que la defensa oficial de Alvarez González propuso que una sobrina suya que es abogada sea “garante” de sus salidas del penal, pero aparentemente no tiene vínculo con esta mujer y nunca lo visitó en la cárcel. Además, un estudio psicológico indicó que “no ha logrado modificar su conducta frente al delito, ni ha desarrollado un proceso de autocrítica y reflexión”. “Se observan en su discurso conductas y acciones manipuladoras tendientes a lograr su beneficio personal por sobre el compromiso o vínculo con el otro”, agrega.
Por eso, el juez Pérez Arias rechazó el pedido de salidas transitorias y dispuso que continúe con tratamiento psicológico. En tanto, la defensa del condenado apeló la medida y ahora deben resolver los jueces Eugenio Sarrabayrouse, Horacio Días y Pablo Jantus.
Bagnato, quien fue participante del programa Gran Hermano, contó que actualmente tiene custodia policial en la puerta de su casa y le dieron un botón antipánico.
La “Masacre de Flores” ocurrió el 17 de febrero de 2004 en la casa de la familia Bagnato, ubicada en la calle Baldomero Fernández Moreno 1906, donde un hombre roció la propiedad con combustible y generó un incendio.
Por el fuego, murieron el padre de familia, José Bagnato (42); su esposa Alicia Plaza (40); sus hijos Fernando (14) y Alejandro (9) y Nicolás Borda (11), un amigo del menor de los chicos que esa noche se había quedado a dormir. El único que logró salvarse de las llamas al saltar desde la planta superior de la casa a la calle fue Matías, quien por entonces tenía 17 años.
Los investigadores determinaron en pocas horas que el autor de la tragedia era Alvarez González, un comerciante y ex socio de José Bagnato que le reclamaba una deuda y amenazaba a toda la familia. El imputado fue condenado a prisión perpetua en 1995, pero por tener su ciudadanía española en 2004 fue extraditado a España para terminar de cumplir su condena, pero lo liberaron y fue recapturado en la Argentina en 2011.
