El juez federal de Orán, Raúl Reynoso, aseguró hoy que días atrás recibió una amenaza sobre un probable atentado contra una de sus hijas, a quien planeaban “lastimarle” la cara, y anticipó que denunciará a su par de Salta, Julio Bavio, quien lo investiga en una causa por la presunta recepción de dinero para favorecer a narcos.
“Es la primera oportunidad en que yo hago conocer esto al periodismo, siempre he estado con mi familia soportando todo lo que nos tocó soportar”, expresó el magistrado, al dar a conocer escuchas telefónicas en las que recibió amenazas.
Así comenzó la conferencia de prensa que ofreció esta mañana el juez acusado de recibir dinero para favorecer anarcocriminales con gestiones judiciales, como la libertad, y cuyo juzgado fue allanado el miércoles, en el marco de una serie de procedimientos ordenados por el juez federal Bavio, que incluyeron la detención de cinco abogados y un funcionario judicial.
Luego, Reynoso brindó los detalles de una serie de amenazas recibidas, incluso de la última, registrada hace tres o cuatro días: “Fuimos advertidos que habían elegido a una de mis hijas nuevamente para hacerle un atentado, lastimarle la cara”, señaló.
“Estoy evaluando qué caminos vamos a seguir. Por lo pronto, estoy haciendo una presentación en el Consejo de la Magistratura donde estoy denunciando a un magistrado de Salta Capital, al doctor Julio Leonardo Bavio”, anunció.
Asimismo, señaló que todavía no ha prestado indagatoria en la causa a cargo de ese magistrado y que no sabe cuáles son las pruebas que hay en su contra porque no ha tenido acceso al expediente.
“No sé de lo que se me acusa, tengo sólo los dichos periodísticos”, remarcó.
La citación de Reynoso, que no está detenido porque lo protegen sus fueros, fue fijada para el próximo miércoles a las 10, para conocer la imputación y brindar declaración indagatoria.
El juzgado a su cargo fue allanado por una investigación iniciada por el presunto cobro de sobornos para liberar a narcos, en tanto que el magistrado fue considerado líder de la organización.
Además del juzgado, donde se secuestraron varias causas, Bavio, con la colaboración de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), allanó otros domicilios de Orán y Salta capital y detuvo al reconocido abogado salteño René Gómez, quien permanecía internado en una clínica.
Esta tarde, se esperaba un informe de la evolución de su salud para establecer la fecha de audiencia.
También fueron apresados otros tres letrados, Ramón Antonio Valor, Arsenio Eladio Gaona y Lucinda María Segovia y el jefe de Despacho del juzgado de Reynoso, Miguel Angel Saavedra.
La única que permanecía prófuga era la abogada María Elena Esper, que se presentó hoy junto a sus defensores y pidió la detención domiciliaria por tener más de 70 años, al tiempo que se fijó audiencia para su declaración el lunes próximo.
Ayer, Segovia prestó declaración, mientras que Saavedra y Gaona hicieron lo propio esta mañana, y se aguardaba la audiencia de Valor.
Estas medidas ordenadas por Bavio se enmarcan en una investigación del fiscal Eduardo Villalba y su par de la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar), Diego Iglesias.
Los delitos que se les imputan son “asociación ilícita, cohecho pasivo agravado, en carácter de partícipes primarios en el caso de los letrados y autor respecto del magistrado, o exacciones ilegales y prevaricato”.
“Los magistrados tenemos que actuar con el principio de reserva, para evitar entorpecer los casos, y eso también estoy denunciando porque en el momento de las acciones judiciales muchos de los periodistas ya estaban en conocimiento de todo”, sostuvo Reynoso en la conferencia de hoy.
El funcionario judicial anticipó que, además de presentar una denuncia contra Bavio, realizará otras entre lunes y martes que prefirió no dar a conocer.
El juez contó que tiempo atrás lo denunciaron por 340 expedientes y que estuvo sometido a un jury de enjuiciamiento.
“Entonces, la Corte Suprema y el Consejo de la Magistratura dispusieron hacerme una auditoría en el Juzgado y se llevaron mil trescientos cincuenta expedientes y no once como en este caso. Estudiaron una por una las causas y cuando se dictó el fallo me absolvieron de responsabilidad, opinaron que estaba todo conforme a derecho, pero tuve que hacer el descargo causa por causa”, explicó.
Tras aclarar que ganó “este cargo por concurso”, Reynoso, consideró un hecho “muy grave allanar un juzgado”, por lo que entiende que “el juez tendrá los elementos para disponer”.
“Lo que digo es que es muy curioso que desde hace unos meses me siento acosado por presentaciones maliciosas. Institucionalmente lo que sucede es de gravedad inusitada. Lo digo en mi denuncia”, concluyó el magistrado, en su diálogo con la prensa que se extendió por más de una hora, en la sede de su Juzgado, en la ciudad de San Ramón de la Nueva Orán, a 270 kilómetros al norte de Salta capital.
