Trabajo esclavo: clausuran talleres donde se sorteaba el turno para descanso

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Se realizaron 7 allanamientos en los barrios de Flores y Mataderos en donde se clausuraron talleres clandestinos en donde había “trabajo esclavo” y “reducción a la servidumbre”.

En estos lugares los empleados trabajaban y además vivían, haciendo jornadas de trabajo de más de 14 horas, y además había un sistema de “sorteo” de turnos para descanso.

El sistema de “sorteo” consistía en una “ruleta” de turnos. Al empezar la semana colocaban en cada aspa el nombre de un trabajador. Alrededor ponían los números correspondientes a cada día de la semana. El encargado, a modo de ritual giraba la ruleta, y así quedaba establecido quién y qué día tenía una hora de descanso. En esta hora podían elegir como “premio” comer, ducharse o descansar.

En el taller había habitaciones donde vivían los trabajadores y sus familias. Muchas de estas personas eran extranjeras y tenían irregularidades en su documentación.

Los trabajadores hacían jornadas que arrancaban a las 8 de la mañana y terminaban a las 12 de la noche. Además, cada empleado tenían a su cargo su familia para el trabajo.

Había una división familiar del trabajo. Cada una de esas familias se encargaba de una especialidad del jean. Unos colocaban los botones, otros las etiquetas y así con cada parte de la prenda.

En uno de los talleres clausurados, el encargado argumentó que en ese lugar funcionaba una cooperativa. Dijo también que cada familia conseguía su propio cliente y traía la tela y lo hilos y “alquilaba” su máquina.

Sin embargo, al momento de ser requerida la documentación no contaba con ningún tipo de respaldo legal. Según los investigadores, todos los “box” tenían el mismo pantalón, las mismas etiquetas y los mismos botones. Lo que les hizo confirmar que se estaba produciendo en serie. Además no tenían ningún tipo de habilitación y las condiciones de trabajo no eran las necesarias.

En uno de los talleres los encargados se resistieron al allanamiento. Usaron una máquina de coser como “barricada” para impedir el acceso. Se colocaron detrás de la máquina y la empujaban hacia la puerta mientras los agentes intentaban ingresar. Una vez que desistieron se ingreso al taller.

Los talleres fueron clausurados y se secuestraron máquinas de coser y de corte, rollos de tela, prendas y etiquetas. En total había 14 familias bajo este régimen de “trabajo esclavo”.

Los resultados de los allanamientos quedaron bajo la orden y disposición del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal N° 5 a cargo del Doctor Martínez de Giorgi.

Los operativos estuvieron a cargo de la División de Delitos Complejos de la Policía de la Ciudad. Participaron también la Dirección Nacional de Migraciones; AFIP, la Dirección de Habilitaciones y Permisos de la Ciudad de Buenos Aires; Programa Nacional de Rescate y Acompañamiento de las Personas Damnificadas del Delito de Trata del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación y Dirección General de Protección del Trabajo del Gobierno de la Ciudad.