Flores, escenario de 40 de los 175 homicidios que hubo en la Capital

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Hace poco más de un mes, Claudio Olivera, sargento de la Policía Federal, fue asesinado durante un enfrentamiento en el que se dispararon 30 balazos. Fue cuando intentó impedir que dos ladrones en moto asaltaran a una mujer que estaba por estacionar su Renault Clio en Felipe Vallese, entre Helguera y Cuenca. A mediados de noviembre, la dueña de una carnicería situada en Ramón Falcón al 2400 fue asesinada por un chico de 17 años. Ambos homicidios tuvieron como escenario el mismo barrio porteño: Flores.

Según un informe presentado ayer en el Consejo de la Magistratura revela que en ese barrio se registró el mayor número de homicidios en la Capital. De los 175 asesinatos ocurridos en 2015 en la Ciudad de Buenos Aires, 40 se registraron en la zona de Flores.

El estudio realizado por el Instituto de Investigaciones del Poder Judicial reveló, además, una alta tasa de homicidios en los barrios de emergencia. El índice fue de 49,45 cada 100.000 habitantes. En los asentamientos de la Capital viven 165.800 personas. En ellos hubo 82 asesinatos durante 2015, casi la mitad del total del distrito.

Según el informe, los 175 asesinatos cometidos en 2015 representan una tasa de 6,05 de homicidios dolosos cada 100.000 habitantes. Es una disminución del 11,62% con relación al 2014, cuando el mismo índice llegó a 6,86. hace dos años, precisamente, se produjo la tasa de homicidios dolosos más alta en el último lustro.

Hubo ese año 198 asesinatos en la Capital, 23 más que en 2015. En 2013 la tasa de homicidios había sido de 6,08; en 2012, de 5,49; en 2011, de 6,54, y en 2010, de 5,80.

Con respecto a la distribución geográfica de los asesinatos, como se dijo, 82 episodios ocurrieron en las zonas de asentamientos precarios. En Flores, por ejemplo, reina la violencia en la villa 1-11-14.

El resto, 93 homicidios, se repartió en los barrios más poblados de la Capital. Si se exceptuara lo que ocurrió en las villas, disminuyó la tasa de homicidios.

En Palermo, el barrio más poblado de la ciudad, con 226.000 habitantes, se registró la menor tasa de asesinatos: 1,77 cada 100.000 personas. Allí, durante 2015 hubo cuatro homicidios.

En tanto, Flores, donde viven 164.000 personas, fue escenario de 40 asesinatos, con lo que allí, el índice de homicidios superó los 24 cada 100.000 habitantes, seis veces más que la tasa promedio de la ciudad que es de 6,05 asesinatos cada 100.000 personas.

Si se revisa comuna por comuna, la zona con mayor tasa de homicidios fue la 1, integrada por los barrios de Constitución, Puerto Madero, San Nicolás, San Telmo y Retiro. Allí, durante 2015 fueron asesinadas 49 personas.

En esa zona la tasa de homicidios fue de 24 cada 100.000 habitantes, similar a la de Flores. Esto tiene una explicación: el crecimiento de los niveles de violencia en las villas 31 y 31 bis, detrás de las terminales de ómnibus y de trenes de Retiro, donde recrudecieron los enfrentamientos entre bandas narcos por dominar el territorio para vender drogas.

El estudio judicial presentado ayer puso al descubierto la gran cantidad de armas de fuego que hay en la calle. De los 175 asesinatos, al menos 111 fueron concretados con armas de fuego. Mientras que en el resto de los casos los asesinos usaron armas blancas, armas no convencionales o sus propias manos.

Con respecto a las víctimas, el estudio indicó que el 82 % de las personas asesinadas fueron hombres, mientras que hubo 31 mujeres que resultaron víctimas de asesinatos. En 19 de esos hechos la Justicia consideró que habían sido corolario de la violencia de género. Es decir, femicidios.

También se revelaron en el estudio las nacionalidades de las víctimas. Al menos en 66 de los 175 homicidios las víctimas eran extranjeras. Esto significa que casi cuatro de cada diez personas asesinadas durante 2015 en territorio porteño eran inmigrantes residentes en el país. Esa particularidad se remarcó en los casos ocurridos en la zona sur de la ciudad.

Además, los números señalaron que tanto en la villa 1-11-14, del Bajo Flores como en las 31 y 31 bis, de Retiro, donde se registraron 29 víctimas en cada una, se duplicó la cantidad de homicidios con respecto al registro del año anterior.

Al revisar cuáles fueron los móviles de los asesinatos, el estudio concluyó que la motivación dominante en al menos 73 hechos -que representan al 42 % de los casos- fue el supuesto ajuste de cuentas o venganzas. Esta presunción se funda en que en el 44% de los homicidios las víctimas de los asesinatos vivían en el mismo barrio que los autores de los asesinatos.