Personal de la Comisaría 51 que se encontraba recorriendo la zona de los Bosques de Palermo observó a una mujer en la esquina de Alsina y avenida de los Ombúes, quien al percatarse de la presencia de los uniformados arrojó un objeto brillante al piso y se metió algo en la boca.
Rápidamente, los agentes procedieron a identificarla y a requisarla, encontrándole dentro de su cartera una lata con 20 bolsitas de cocaína, más de cinco mil pesos y un teléfono celular.
En el momento en que procedían a leerle sus derechos en presencia de testigos, la imputada comenzó a tener arcadas, para luego vomitar un profiláctico que contenía 29 envoltorios de cocaína.
Mientras, Personal de la Comisaría 22 que se encontraba recorriendo la zona del Barrio Rodrigo Bueno observó a un hombre con características similares a la de un delincuente que se encontraba prófugo de la Justicia.
De inmediato los oficiales descendieron del móvil, dieron la voz de alto y lograron reducirlo e identificarlo.
Previo a corroborar si se trataba de la persona sobre quien caía una orden de captura por robo se consultó al Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción N° 12, que ordenó el traslado del malviviente a la dependencia policial hasta el día lunes para remitirlo a la sede judicial y tramitar los oficios correspondientes.
En Palermo, personal de la Comisaría 21 que se encontraba recorriendo la avenida Córdoba observó a un sujeto que corría velozmente y detrás suyo una mujer, quien gritaba: “me robó el celular”.
De inmediato, los oficiales comenzaron a perseguir al delincuente, reduciéndolo a los pocos metros.
La víctima indicó que momentos antes, mientras caminaba haciendo uso de su teléfono, el malviviente se lo arrebató y comenzó a correr. Sin dudarlo y desesperada decidió perseguirlo pidiendo ayuda.
Luego de leerle sus derechos en presencia de testigos, fue trasladado a la dependencia policial N° 9 con el fin de labrar las actas de rigor. La víctima asistió a la Comisaría para radicar la denuncia y que se le devolvieran su teléfono.
El caso quedó a cargo del Juzgado de Instrucción N° 11.
Por último, Personal de la Comisaría 48 que se encontraba en el barrio de Mataderos fue desplazado a la intersección de las calles 2 de abril y Montiel por la presencia de dos sujetos que habían ingresado a una vivienda.
Al llegar, los oficiales inspeccionaron la casa y encontraron una ventana violentada y una escalera que conducía a una terraza donde se encontraban los dos delincuentes con todos los elementos robados.
Rápidamente los efectivos dieron la voz de alto sorprendiendo a los malvivientes quienes al verse acorralados se entregaron.
Ambos fueron detenidos e identificados, constatando que uno de ellos era menor de edad. Luego de leerles sus derechos en presencia de testigos y por solicitud del Juzgado Nacional de Menores N° 6, el mayor fue alojado en la dependencia policial.