Las evidencias que podrían incriminar al sereno con el doble femicidio de La Matanza son elementos que fueron hallados en la escena de los crímenes: un preservativo, el cable del cargador de celular, el cinto de una bata y un trozo de acolchado.
Por eso, los peritos de la Policía Científica buscan evidencias de ADN que incriminen al principal sospechoso, detenido este lunes en la provincia de La Pampa.
Una fuente de la investigación reveló a Télam que “es mucha la evidencia científica recolectada en el lugar del hecho y lo más probable es que en poco tiempo tengamos perfiles de ADN para cotejar”.
Una de las principales evidencias halladas en una mesa de luz ubicada junto a la cama donde yacían los cadáveres de Florencia Ayelén Mariezcurrena (14) y de María Soledad Ramos (26) es un preservativo usado y ensangrentado, del que se espera obtener el perfil genético del autor del hecho.
Otras evidencias fueron encontradas anudadas a la parte inferior de la cama y se cree que fueron utilizadas primero para la sujeción de las víctimas y luego para cometer el estrangulamiento.
Se trata del cinto de una bata de baño y un cable negro arrancado del cargador de un celular, éste último compatible con la marca del surco de ahorcadura que presentaban las víctimas.
De ambos elementos se tomaron muestras para hallar lo que se denomina “ADN de contacto”, al igual que del cuello, las muñecas y la boca de las víctimas.
También se encontraron debajo de la cama una media de color azul que será enviada a laboratorio y del acolchado color blanco encontrado en la cama se recortaron los pedazos que reaccionaron ante la luz ultravioleta, frente a la posibilidad de que sean manchas de semen de el o los asesinos.
“Todo indica que Cristian Héctor Perrone fue el autor de este doble femicidio pero aún no debemos descartar que haya actuado con algún cómplice. Esperamos que la evidencia científica despeje esas dudas”, dijo a Télam el investigador consultado.
