Adrián Conci, el presidente de Dell Producciones detenido por la muerte de cinco jovenes en la fiesta Time Warp de Costa Salguero, se negó hoy a declarar en la indagatoria ante el juez federal Sebastián Casanello.
Conci ingresó al penal de Ezeiza “en el módulo para internos primarios, en un pabellón común“, informó la fuente consultada por Télam.
Tal como había adelantado su abogado defensor, Fernando Burlando, el empresario se negó a responder preguntas luego de escuchar la acusación en su contra y quedó detenido.
Frente a Frente. Casanello lo acusó de “facilitar y tolerar la venta, distribución y consumo de sustancias no controladas en el interior del predio”.
“Esas circunstancias más la asistencia de más de 20.500 personas colocó a los concurrentes en una situación de vulnerabilidad y desamparo”, agregó el juez.
Conci, estuvo prófugo por más de nueve días entregó en medios de llantos y con un Rosario en la mano. Llegó temprano, junto a su abogado Fernando Burlando, al despacho del juez Sebastián Casanello quien estas últimas horas lleva adelante una serie de allanamientos en la provincia de Santa Cruz.
Entre los hechos que le leyó a Conci, el juez recordó que la madrugada del 15 al 16 de abril, los organizadores del evento contrataron un “servicio adicional” por parte de la Prefectura Naval, pero varios concurrentes al evento hablaron de “carencia de cacheos”.
Conci ya había declarado sobre el papel de la Prefectura Naval en en calidad de testigo, al día siguiente de la tragedia, cuando palabras más palabras menos, dijo: “El cacheo se hace si Prefectura quiere hacerlo”.
Entre los argumentos que empleó para denegar la petición, la sala II de la Cámara de Apelaciones consideró la calificación efectuada por el fiscal Federico Delgado, quien consideró que la responsabilidad del empresario radica en los testimonios que afirman acerca de la escasa revisión a los asistentes al ingresar y el continuo ofrecimiento de todo tipo de drogas”.
También en las condiciones denunciadas por los testigos en las que se desarrolló la fiesta, como hacinamiento, escasa ventilación, principios de asfixia en los concurrentes, falta de agua potable en los baños para hidratarse y la indiferencia de los organizadores “que solo miraban y oían los gritos de auxilio”.
Los camaristas destacaron además que de hallarse culpable, la condena hacia Conci “sería necesariamente de cumplimiento efectivo” y que la pesquisa “presenta una notable evolución y abarca el origen de los estupefacientes que circularon en la fiesta, las condiciones en las que se habilitó el lugar y la presumible connivencia de fuerzas de seguridad”.
Esta mañana Conci había llegado a los tribunales federales de retiro acompañado por sus abogados, Améndola y Fernando Burlando. “Es muy alocado todo esto, soy un hombre de familia”, dijo antes de entregarse, y afirmó que estuvo “prófugo de la ley por consejo de mi defensa”.
En tanto, Burlando afirmó ante la prensa que “el responsable de las muertes es el narcotráfico”, y consideró que “Conci está acá para dar su versión, el hecho de organizar el evento no lo hace responsable de estas muertes y mucho menos de la venta de drogas. Creo que vincularlo al narcotráfico y a estas muertes es irracional, una locura”, afirmó.
Al llegar a Tribunales, Casanello dispuso el alojamiento temporario de Conci en la Comisaría 46°, ubicada a metros de los tribunales de Comodoro Py, y el empresario se convirtió así en el sexto detenido de la causa, después de los también responsables de Dell Producciones Maximiliano Ávila y Carlos Garat (a quien podrían excarcelar debido a que tiene 73 años), además de los tres dealers.
En tanto, dos de los tres jóvenes internados en el Hospital Fernández tras haber participado de la fiesta presentan mejorías y les quitarán la asistencia respiratoria, aunque continúan en terapia intensiva, al igual que el tercer adolescente que sigue en “estado crítico”, indicó hoy un nuevo parte médico, informó el Ministerio de Salud porteño.
